La información sobre tipos de dolores está siendo muy demandada en otros paises. Hablamos de dolores de diferentes tipos en sistema bucodental para poder tratarlo adecuádamente.
El dolor es la contraseña que se utiliza para informar al SNC sobre un desajuste sufrido por los músculos (hematoma), articulación (esguince), organos internos (alimento en mal estado)… .En sentido inverso, es la forma mediante la cual el SNC le comunica a los músculos (contracción), a los órganos internos ( intestinos, estómago), a la piel (psoriasis) que sufre una sobrecarga o daño.
Para que remita un dolor hay que eliminar el factor etiológico principal y no siempre es fácil de localizar y entender. Si un traumatismo ha lesionado un músculo, éste entre otras cosas, necesitará reposo que recordaremos mantener gracias al dolor (ej: si duele al mover mandíbula hacia derecha no la debemos mover hacia la derecha hasta que pase el dolor). A la inversa, si un músculo duele sin haberlo sobre-estimulado o golpeado, entonces sospecharemos de una orden mal dada por parte del SNC ¿Cómo hacer para volver a funcionar sin dolor?
Sistema Nervioso Central
Las Neuronas con células encargadas de transmitir impulsos nerviosos mediante señales químicas y/o eléctricas.
Podemos distinguir fácilmente 3 tipos de Neuronas;
- Las aferentes, forman las vías aferentes y llevan la información de nuestro entorno al Sistema Nervioso Central (SNC). Si nos duele tocar algo y no nos hemos clavado una astilla ni está dañada la zona entonces esta vía puede haber sufrido un daño y estar llevando mal la información.
- Las Interneuronas, que se localizan en el encéfalo y médula espinal (SNC), son las encargadas de elaborar respuestas más o menos sofisticadas, de mayor o menor emergencia. Si su entorno está cargado de encefalinas, por ejemplo, las interneuronas notarán sensaciones gratificantes, por el contrario, si la presión de los vasos sanguíneos de la cabeza aumentara considerablemente (por aumento de vasopresina en el HHA), un estímulo ordinario de nuestro entorno podría ser confundido con una amenaza y provocar en nosotros una alerta innecesaria. Dentro del SNC se gestiona también al Sistema Nervioso Autónomo, si nos lagrimea sólo un ojo, o sólo se nos congestiona una narina… podemos sospechar de una actividad mal regulada a nivel central (vasos sanguíneos, glándulas…) porque si fuera una alergia nos lagrimearían los dos ojos, se congestionarían las dos narinas
- Las neuronas eferentes, forman las vías eferentes y son las que van del SNC a la periferia llevando la respuesta para dar lugar a una reacción a nivel muscular. Si por ejemplo, notamos un músculo contraído y no hemos realizado esfuerzos extremos ni hemos sufrido un golpe en la zona, es posible que la vía eferente esté dañada o esté sobre-estimulada.
Hay actividades que se repiten día tras día como andar, peinarse, cepillarse los dientes, comer… para eso se crean unos patrones a un nivel más subconsciente, así se gana en rapidez y agilidad. En el caso de comer, hay ciertos patrones adquiridos. Si hubiera un diente dolorido el patrón se modificaría para que al comer este diente no duela. Los patrones adquiridos pueden ser más o menos estables, es decir,tener mayor o menor sensibilidad a nuevos estímulos. Hay personas que mastican con similar fuerza y numero de mordiscos un alimento duro y seco que uno blando y jugoso.
Hay veces que necesitamos ser muy rápidos, por ejemplo en situaciones donde un tejido de nuestro cuerpo corre peligro (al masticar y encontrar una piedrita, si no actuamos rápidamente podríamos romper una muela) para esto existen los actos reflejos. En los actos reflejos las respuestas ya están aprendidas de antemano y el papel de las interneuronas es menos relevante, de esta forma se gana en rapidez.
Los actos reflejos que tenemos se miden dando un golpecito con un martillo de goma en la rodilla, a mayor rapidez de reacción mayor cantidad de reflejos. Los músculos están preparados constantemente para que el acto reflejo tenga lugar manteniéndose constantemente en estado de tono. El sistema Ganma-eferente participa regulando el tono muscular. A mayor cantidad de sistema Ganma-eferente mayor cantidad de reflejos. El estrés emocional aumenta la cantidad de sistema Ganma-eferente y por tanto la cantidad de reflejos. Éste exceso provoca múltiples micro-contracciones que fatigan el músculo. También, debido al aumento de actividad del sistema Ganma-eferente, pueden aparecer actividades irrelevantes como morderse las uñas o apretar los dientes (bruxismo).
Para contrarrestar una vigilia excesiva capaz de sobrecargar el sistema nervioso y/o los músculos, cabe destacar el sistema inhibidor del sistema nervioso que se activa antes de ir a dormir, cuyo principal representante es la serotonina. Hay también dos inhibidores (opiáceos) endógenos denominados endorfinas cuya secreción puede estimularse de la siguiente forma:
*Las Encefalinas; Son liberadas al líquido cefalorraquídeo y esto reduce el dolor percibido en los tejidos controlados por estas áreas del encéfalo o la médula. Actúan de forma rápida y local y reducen el dolor. Para su liberación parece que ciertas áreas del cuerpo deben estimularse a un nivel doloroso de forma intermitente. Ésta es la base de la acupuntura.
*Las Betaendorfinas son liberadas por la hipófisis al torrente circulatorio como hormonas, tiene una acción más lenta y duradera. Son liberadas al hacer ejercicio físico prolongado, esto puede ayudar a explicar por qué los corredores de larga distancia experimentan una sensación de euforia después de una carrera (“el subidón del corredor”)
Sistema muscular
Los músculos son vagos por naturaleza. Cuando molestan, si los colocamos conscientemente en una posición adecuada y la intentamos mantener con frecuencia podremos equilibrarlos mejor para que dejen de interferir en nuestras actividades cotidianas. Si duelen es mejor dejarlos en reposo y ejercitarlos gradualmente una vez haya pasado el dolor.
Las células musculares se agrupan formando fibras .El tono muscular se mantiene con una cantidad mínima de fibras musculares en contracción que se van turnando de forma regular.
Movimientos antagónicos; si prestamos atención a los músculos que permiten cada movimiento y posición, podremos comprobar que unos al contraerse van hacia una dirección y otros músculos diferentes al contraerse van hacia la dirección contraria, para que suceda un movimiento unos se contraen y sus contrarios se distienden.
Por ejemplo en la cabeza los músculos que la elevan son:
los que la bajan son:
En la mandíbula los que la suben son:
los que la descienden son:
- músculos suprahioideos.
Por eso una posición inadecuada hará que unos músculos tengan sus fibras excesivamente distendidos y sus contrarios excesivamente contraídas.
A mayor cantidad de fibras musculares en contracción, mayor cantidad de presión muscular. La presión en exceso dificulta el flujo dentro de los vasos sanguíneos. La sangre aporta nutrientes y oxígeno a los tejidos musculares y se lleva sus metabolitos de desecho. El dolor muscular se asocia a menudo con un acúmulo de metabolitos de desecho en la zona. La fatiga muscular se asocia a una demanda de sangre mayor a la aportada.
Una presión muscular mantenida afecta a las estructuras a las que envuelve el musculo en cuestión. Las articulaciones se verán afectadas por la dificultad de renovar su líquido sinovial por el exceso de presión en su entorno. El líquido sinovial no solo nutre, oxigena y se lleva metabolitos de desecho si no que también lubrica las superficies para que se deslicen unas sobre otras de forma suave. Los ligamentos que unen las superficies articulares al músculo se verán obligados a ejercitar su función (limitante del movimiento) durante mayor tiempo, esto los daña en su estructura y su función terminará siendo menos efectiva. La articulación además de no poder moverse con normalidad y ver reducido su líquido sinovial estará menos protegida por los ligamentos. Esta situación provoca un dolor más duradero y constante porque ahora no solo tendrán que eliminarse las contracciones excesivas a nivel muscular si no que tendrán que mantenerse unas condiciones óptimas para que las estructuras articulares debilitadas se recuperen.
Todos los dolores de tipo crónico (más de 6 meses de duración) se tratan de forma multidisciplinaria porque las estructuras nerviosas, musculares y articulares han soportado condiciones adversas que han provocado destrozos en sus tejidos. El tiempo de reparación puede ser de hasta un año o más según los tratamientos seguidos y el grado de afectación de las diferentes partes:
-Si una vía de transmisión de impulsos nerviosos está activa durante demasiado tiempo es complicado que el impulso se transmita por vías diferentes a esa. Un camino muy transitado es más fácil de coger que uno nuevo campo através.
-Cuando no se ha movido un músculo durante un tiempo debido al dolor y después al moverlo hemos perdido amplitud de movimiento es debido a que las fibras del músculo están pegadas y hay que ir separándolas y distendiéndolas suavemente para su recuperación. Si al tratarlas provoca dolor volverán a contraerse como forma de protección y no se avanzará en ese sentido.
-Si una articulación duele hay que tratar las estructuras que la envuelven para que no la presionen y buscar la causa que provoca su descompensación particular para procurar regularla.
Podemos concluir tras estos datos que un dolor debe escucharse y tratarse para que dure menos tiempo. Los tipos de dolor son diferentes porque también son diferentes los tipos de ataque ( inflamaciones que también comprimen estructuras, falta de vitaminas o nutrientes forman estructuras incompletas, ataques bacterianos o víricos que invaden nuestros tejidos, desequilibrios hormonales que alteran el eje HHA, etc…) y los tipos de receptores (del dolor, de tacto, del movimiento). Los receptores que captan la información del exterior son de diferentes diámetros por eso si nos aplastamos un dedo y lo agitamos y lo tocamos duele menos, porque los receptores del movimiento y del tacto son mayores en diámetro que los del dolor y por tanto prioritarios para llevar la información al SNC. Describir el comienzo del dolor, su duración, tipo, a partir de qué se desencadenó… es muy valioso a la hora de diagnosticar el problema principal.
El propio organismo está muy preparado para hacer frente a múltiples ataques y en ocasiones hay que tratarlo desde fuera para complementarlo (con ejercicios, psicología, fármacos, fisioterapia, neurología, odontología conservadora y preventiva) o repararlo (con cirugía oral, traumatológica, neurológica, etc). Gracias a todos estos avances por parte del cuerpo y de las investigaciones que se realizan para conocerlo a fondo, nuestra calidad de vida mejora año tras año y es recomendable familiarizarse con estos descubrimientos.
Resumen de: Mª Laura Tezza Lusardi.